Recientemente he sido consciente que hace 20 años, justo al inicio de mis años de instituto, mis padres decidieron comprar mi primer ordenador. Anteriormente ya había tenido la oportunidad de trastear en la asignatura de informática del colegio, pero no fue hasta tener ese ordenador de segunda mano en casa que realmente me adentré en el mundo de la programación y la administración de sistemas.
Hay eventos en nuestras vidas que dejan huella y producen cambios profundos, éste fue uno importante para mi y mi familia. En aquellos años descubrí mi pasión por la tecnología, y con el tiempo lo pude compartir también con mi hermano. Hoy en día es mi herramienta indispensable y disfruto de ella tanto en mi trabajo actual (p.ej. estudiando la composición química de las estrellas) como en mi tiempo libre.